Bebidas típicas como el tepache, téjate y mezcal protagonizan las fiestas tradicionales de Oaxaca, como la Guelaguetza que enaltece el arte de compartir y que este 26 de julio celebra de forma digital la octava del Lunes de Cerro desde la rotonda de la azucena en armonía con las costumbres y tradiciones de sus ocho regiones.
El tepache se obtiene del fermento de frutas, y Gladys Montaño, cocinera tradicional originaria de Villa Sola del Vega lo prepara con piña criolla, panela, clavos de olor, pimienta y canela, ingredientes que deja fermentar de tres a cuatro días en una olla de barro que cubre con una manta. Esta preparación se revisa continuamente para rectificar su sabor; pasado el tiempo se agregan agua y hielos y se sirve a los invitados. “En San Lorenzo encontramos productores que siembran y cultivan la piña criolla, fruto que aporta un sabor inconfundible a nuestro tepache”.
Esta bebida se acostumbra en todas las fiestas, principalmente en las bodas en las que se sirven sopa, plato fuerte y dulce de frutas; es representativa de la Guelaguetza durante el baile del Jarabe de la Rosa, cuadro de danza que identifica a las fiestas de casamiento soltecas. Al ritmo de la chilena los integrantes bailan, mientras se les reparten la rosa del borracho, mezcal o un jarro de tepache”.
Gladys explica que la rosa de borracho es una hierba que se da en el cerro, previo a las festividades se corta y se preparan coronas y ramitos, ya en la fiesta se sacan a bailar a las cocineras, señal de que se va a servir la comida. Ella transmite su conocimiento en su cocina de humo ubicada en Villa Sola de Vega a través de talleres que destacan el uso de los fogones, ollas de barro, cazuelas, cucharas de madera, comales; una experiencia en donde vives y cocinas con leña.
Jorge Bueno Sánchez, cronista de la Ciudad de Oaxaca de Juárez, explicó que en cada una de las regiones se puede apreciar las diversas costumbres que destacan en sus fiestas de los santos patronos, bautizos, bodas. «Todas las regiones son extraordinarias, su presencia siempre estará completa en nuestra máxima fiesta de los Lunes de Cerro, La Guelaguetza»
En sus trajes, música y bailes podemos sentir su esencia y su forma de expresión, un sentimiento de amor que se hace presente en esta celebración que reúne a las ocho regiones que muestran sus tradiciones y que reafirma la grandeza de la vida
Identidad en armonía con su cocina, “un concierto de sabores, olores y colores”, añadió el cronista Jorge Bueno, la cocina de Oaxaca forma parte de la riqueza gastronómica que distingue a México y que es Patrimonio de la Humanidad. Cuenta con gran variedad de ingredientes, platillos y bebidas como el mezcal. “Oaxaca tiene más de 120 magueyes, todos con una característica especial; el tepache, antigua cerveza y bebidas de rescate como el téjate”.
Noemí López, cocinera tradicional de Soledad Etla prepara el téjate con maíz, cacao y rosita de cacao, flor que aporta un delicioso aroma a esta bebida emblemática. Durante la Guelaguetza oferta una variedad de moles, su tradicional barbacoa de horno y mezcal en su restaurante Maíz Cocina Tradicional.
“La cocina de Oaxaca representa amor, es valorar nuestras tradiciones y cultura; es un sentimiento de amor que se hace presente en cada una de las tortillas, recetas y bebidas que preparo. Las tradiciones se viven, se comparten y se disfrutan”.
La octava de los Lunes del Cerro se vivirá por las diversas plataformas digitales de CORTV y redes sociales oficiales en transmisión matutina a las 10:00 am y vespertina a las 17:00 horas.