La institución que dirige Francisco Ángel Villarreal, recomienda convertir en un comportamiento automático y frecuente el lavado de manos
En este periodo de aislamiento preventivo, el Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca (IEEPO), exhorta a madres, padres de familia y tutores a continuar aplicando desde el hogar, las recomendaciones de higiene establecidas, con la finalidad de mantener la salud de niñas, niños y adolescentes.
Como parte de las Medidas para la prevención del COVID-19 en las comunidades escolares, emitidas por las secretarías de Salud federal, de Educación Pública (SEP) y los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO), atendidas por indicaciones del director general del Instituto, Francisco Ángel Villarreal, se estableció que el primer filtro para evitar contagios es la casa y la familia.
De ahí, la necesidad de hacer conciencia y convertir en un comportamiento automático y frecuente el lavado de manos con agua y jabón por al menos 20 segundos o utilizar soluciones antisépticas a base de alcohol al 70%, ya que ambos tienen similar efectividad.
Asimismo, al toser o estornudar, cubrir la nariz y boca con el ángulo interno del brazo y enseñar esta técnica a los menores de edad; no saludar de beso, de mano o abrazo; evitar tocarse nariz, boca y ojos; no compartir alimentos, bebidas, vasos, cubiertos, lápices, colores, ni utensilios de higiene personal como el cepillo de dientes.
Otras de las medidas son limpiar y desinfectar superficies, barandales, mesas y objetos de uso diario, con productos sanitizantes y jabones; ventilar y permitir la entrada de luz solar en sus casas, no automedicarse, ni medicar a los estudiantes sin prescripción médica, no escupir y practicar la sana distancia.
Para ayudar a los niños a mantener sus vínculos sociales durante el periodo de distanciamiento social, las madres, padres de familia y tutores pueden motivarlos a realizar, bajo supervisión de un adulto, enlaces telefónicos con sus amigos.
Otras de las medidas que el IEEPO recomienda es implementar horarios regulares para acostarse y levantarse, de lunes a viernes; estructurar el día para que incluya momentos de aprendizaje, tiempo libre, comidas y refrigerios saludables, además de actividad física, involucrarlos en las tareas del hogar y mantener comunicación constante con ellos.